AUTOR DEL BLOG

Mi nombre es Marcos... o Espinosa, como queráis llamarme.
El tema es que este blog nació para contar las experiencias vividas y por vivir (sobretodo por vivir) en la ciudad noruega de Trondheim, que es donde en el año 2010-2011 voy a pasar diez meses viviendo, admirando la naturaleza, estudiando, conociendo gente y echando de menos a los míos.
Este es mi nombre y este es mi blog... y todos sois bienvenidos, así que sin ningún reparo mandadme comentarios, preguntadme cosas...lo que queráis. Yo trataré de haceros creer que estáis aquí también, conmigo.

Un saludo y... nos vemos en el frío norte!
mdespinosa@gmail.com


Viaje a Laponia en Navidad, 70º Norte (Parte 1/3)


Hola de nuevo!

Ya con esto más o menos va a estar todo al día en tema de viajes. Son las vacaciones de invierno que nos hemos tomado la familia aprovechando que yo estaba por estas tierras. Hemos pasado parte de la Navidad y la Nochevieja entre el sur, centro y norte de noruega, y ha sido fantástico.

Dejadme que os cuente un poquito. Pero esta vez va a ser menos letra y más imágenes, ya que la naturaleza allí es impresionante.

Finales de Diciembre de 2010

Nuestro primer destino era Oslo, la puerta a Noruega, para mi ya un sitio conocido, pero para mis padres y mi hermana, ese mundo tan salvaje y frío donde estaba su hijo y hermano estudiando. Las primeras impresiones de la nieve desde el avión eran buenas, todo estaba tal cual lo había dejado al marcharme, todo helado y nevado. A mi padre le encantaba todo desde el aire:


Cogimos el bus a Oslo y aunque era tarde ya (había anochecido, a esta época mas o menos a eso de las 15:30 es de noche) nos dio tiempo a dejar las maletas, coger el vale de transporte (Oslo pass) y callejear un poco por la ciudad. Vimos Karl Johans Gate, la calle comercial, la plaza, el Rådhus (ayuntamiento moderno), la zona de Brygge, y cenamos por el puerto.

A la mañana siguiente había que levantarse pronto pues ese es el principal problema del invierno, que hay poca luz y hay que aprovecharla. Esa misma mañana lo primero que hicimos fue coger el metro de superficie para que nos diera todo un tour hasta la cima de la montaña: Frognerseteren, la estación de ski. Desde donde se ve todo Oslo. A medida que subíamos iba amaneciendo.


Allí, tras una foto de familia con el primer rayo de sol del norte del mundo:


... nos dimos cuenta de que realmente el copo de nieve ... tiene forma del símbolo de la nieve, algo que siempre suponemos pero que en España con lo poco y mal que nieva pues no lo había visto, fijáos qué preciosidad de fractal, jejeje:


Al bajar de la montaña aprovechamos para ir a ver los museos más importantes, el de Fråm (el barco de Amudsen), el de Kon-Tiki (el que demostró que se podía ir a américa en balsa) y el del Folclore Noruego, donde están todas las casas traídas de todos los puntos del país, incluido una iglesia de madera vikinga (Stavkirke). Las vistas desde los museos hacia Oslo también son preciosas:


Como no había tiempo que perder, cogimos el tranvía a ver el parque de las estatuas de Oslo, el Vigelandspark, donde vimos este atardecer pétreo.


Eso, lectores, eran las 4 de la tarde, bastante luz había dado para ese día, jeje. Ahora tocaba tranvía a la Ópera, que la vimos todavía con luz. Es una maravilla de la arquitectura moderna. Es tan fotogénica que siempre que voy a Oslo le saco fotos:


Después fuimos a ver la fortaleza de Akersus situada junto al puerto pesquero y el ayuntamiento y antes de cenar fuimos a hacer lo que no habíamos podido hacer al final en Nueva York el año pasado: patinar sobre hielo. En este caso, en la plaza principal de Oslo.


Ahí están mi madre y mi hermana bien de veras sobre el hielo que se atrevieron a enfrentarse al duro hielo. ¿Veis que bieeeen?

Finalmente ese día cenamos en un restaurante típico noruego unos platos de Kjøtt (ternera noruega), salmones diversos y pizza de salmón y cebolla típicas. Riquísimo todo y reconfortante despues de el día tan movidito. Al día siguiente debíamos ir pronto a coger el avión para subir hasta Alta y Karasjok. Esto era lo que nos predecía la temperatura:


Pero ¡baaaahh! ¡¡Símbolos "negativos" a nosotros!! jejeje. No sabíamos que lo mejor del viaje iba a ser precisamente, los momentos de más frío y tranquilidad.

Un saludo a todos!
Mañana continuaré con el peacho viaje :)
Marcos






4 comentarios:

Nines dijo...

Hala que bien!!!! viajecito con la familia.
Espero para seguir leyendo.
Un saludo. Nines

Nerea dijo...

Hola! eres el primero que encuentro que está ahora mismo en Trondheim contando sus experiencias! he leido varios blogs de otros estudiantes que han estado allí, pero es la primera vez que me topo con alguien que está en este momento, lo cual me alegra mucho! jaja
es que el año que viene me voy yo de Erasmus allí y me encanta leer sobre lo que escribes :)
que estudias?
según el tiempo de mi escritorio, allí esta nublado y tienes -4 grados! cómo se lleva lo de que sea de noche?
jajaja
no dejo de informarme para el año que viene ;)

mdespinosa dijo...

Hola Nerea!

Pues sí, aquí estoy. Yo cuando buscaba para irme también veía blogs de gente que había venido pero no de alguien que estuviera. Posiblemente vimos los mismos blogs.

Pues la oscuridad es el peor enemigo de estas tierras, ni tan siquiera el frío. Ahora ya es otra cosa, tenemos 5 horas más de luz que hace un mes, y últimamente sale bastante soleado, así que está todo precioso.

Un saludo!

bettersaul dijo...

Finalmente ese día cenamos en un restaurante típico noruego unos platos de Kjøtt (ternera noruega), salmones diversos y pizza de salmón y cebolla típicas. Riquísimo todo y reconfortante despues de el día tan movidito. Al día siguiente debíamos ir pronto a coger el avión para subir hasta Alta y Karasjok. Esto era lo que nos predecía la temperatura: https://la-voz.net/cultura-chancay/

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